"Siendo honesto, me ha impresionado mucho lo que tienen aquí. Es mejor que en algunos clubes en que he estado. Tiene de todo". Eso dijo Júlio César en su presentación como nuevo jugador de Toronto FC.

Y no es que haya tenido una carrera mediopelo. El tipo ganó de todo con Flamengo, Inter de Milán y la selección brasileña. De hecho, el año pasado fue el Guante de Oro de la Copa Confederaciones, la antesala del Mundial.

Es de esos arqueros top de los últimos años. Curiosamente, y aún siendo titular en la selección, estaba jugando en Queens Park Rangers de la segunda división inglesa. Pero ahora cambió de club.

Pasó a Toronto, el equipo que se armó para romper todo en la MLS. Antes de la llegada de la Júlio César, había concretado las incorporaciones de Michael Bradley y Jermain Defoe, provenientes de Roma y Tottenham respectivamente.

Dos jugadores titulares en dos importantes equipos de Europa. Dos jugadores que tienen grandes chances de estar en el próximo Mundial.

Toronto, que viene de salir penúltimo en su Conferencia el año pasado, ahora pasó a ser candidato al título de un torneo que cada vez tiene más jugadores conocidos.

Por ejemplo, Tim Cahill y Thierry Henry juegan en New York Red Bull, Marco Di Vaio en Montreal Impact, Diego Váleri en Portland Timbers, Robbie Keane en Los Angeles Galaxy, Peter Luccin en FC Dallas y Obafemi Martins en Seattle Sounders.