Los primeros minutos del partido mostraron a un Gremio muy aceitado, proponiendo y controlando absolutamente la tenencia del balón. Obligó a Nacional a jugar de contragolpe y desestimó la estrategia propuesta por Pelusso. De hecho, Alonso quedó muy solo y alejado del peligro que podrían generar los tricolores.

Zé Roberto fue la apuesta del equipo de Porto Alegre. El volante jugó muy rápido y abrió espacios para sus compañeros, quienes rotaron constantemente y engañaron a los locales. El equipo brasilero rotó sus posiciones constantemente.

De a poco Nacional fue apareciendo y tuvo su primera chance clara con un lindo zapatazo del “Corto” Prieto desde afuera. La pelota pasó muy cerca del arco. Desde ahí el panorama se equilibró y los tricolores comenzaron a tener la pelota y chances.

Los albos mostraron rebeldía y robaron pelotas de su rival para generar más peligro arriba. Igualmente el equipo brasilero siguió inquietando y probó con un potente remate de Zé Roberto, que Munúa rechazó. En el rebote el golero también se quedó con el balón. 

La chance más clara de todo el tiempo fue una inmejorable oportunidad para Rinaldo Cruzado. Centro desde la derecha e Iván Alonso ganó la pelota entre los zagueros y asistió al volante. El peruano se llenó la zurda de gol, pero desvió la pelota increíblemente y los tricolores vieron truncada su clarísima posibilidad de ponerse en ventaja.

En el complemento la primera fue para los locales tras un cabezazo desde el tiro de esquina de Andrés Scotti. Tapó muy bien abajo Grohe. Después se puso muy lindo, los dos propusieron y quisieron llevarse los tres puntos.

En Nacional los más incisivos fueron Pereiro y De Pena. En los brasileros Zé Roberto y Hernán Barcos. El juego se puso con mucha intensidad en ambos bandos pero faltó cierta claridad en ofensiva.

En el momento bisagra del partido, cuando ninguno buscaba con tanto ímpetu abrir el marcador, Gremio encontró un centro preciso y aprovechó un grotesco error en la defensa de los locales para ponerse en ventaja. Centro desde la derecha y el paraguayo Cristian Rivero, quien se encontraba sin marca, puso un certero cabezazo para el 0-1 en su favor.

Allí Pelusso se jugó al todo o nada y mandó al “Chino” Recoba y a Juan Cruz Mascia al campo. Le costó al equipo que no encontraba espacios para jugar y los centros pasaban a ser el único argumento. Alonso tuvo su chance con cabezazo pero ante la incomodidad, la pelota pasó cerca del palo.

El otro poroto del técnico tricolor para el milagroso empate fue el juvenil Hugo Dorrego en lugar del peruano Cruzado, de irregular partido. Nada salió. Ni Recoba ni los juveniles le daban la eficacia que necesitaba el ataque albo.

La gran posibilidad vino a dos minutos del final tras una chance que la defensa brasilera desvió bien pero que culminó con un error del árbitro. Rechazo con la mano del argentino Barcos y el paraguayo Arias cobró la mano afuera del área, cuando fue dentro. El tiro libre quedó en manos de Recoba pero la pelota dio en la barrera.

El final mostró a un Nacional nervioso, impreciso, que no estuvo a la altura para empatar un partido que era vital.

Ficha del partido:

Nacional: Gustavo Munúa; Pablo Álvarez, Jorge Curbelo, Andrés Scotti, Juan Manuel Díaz; Nicolás Prieto, Maximiliano Calzada, Rinaldo Cruzado (80´ Hugo Dorrego), Gastón Pereiro; Iván Alonso (73´ Juan Cruz Mascia) y Carlos De Pena (73´ Álvaro Recoba). DT: Gerardo Pelusso.

Gremio: Marcelo Grohe, Pará, Werley, Rhodolfo, Wendell, Edinho, Ramiro (85´ Leo Lago), Cristian Riveros, Zé Roberto (93´ Maximiliano Rodríguez), Luan (90´ Bressan) y Hernán Barcos. DT: Enderson Moreira. 

Gol: 68´ Cristian Riveros (G)

Amarillas: Andrés Scotti (N). Cristian Riveros, Wendell y Hernán Barcos (G)

Jueces: Antonio Arias, Darío Gaona y Eduardo Cardozo.

Cancha: Gran Parque Central.