Tras quedarse con el segundo Balón de Oro de su carrera, Cristiano Ronaldo habló con la revista France Football sobre varios temas, mostrando su lado más sentimental y humano después de algunas declaraciones polémicas en el pasado.

"Un día dije que algunos me tenían envidia porque era joven, guapo y rico. Pero fue un error. Hablé después de un partido cuando estaba muy enfadado porque no había marcado. Como he dicho muchas veces, no soy perfecto. Soy un ser humano hecho de carne y hueso, como todos. Lloro, río y tengo mis problemas. Cuando dije algo que no debía pedí perdón a la gente. Con la edad se aprende de los errores. Maduramos tanto en la vida como en el terreno de juego".

El portugués también explicó por qué rompió en llanto el día de la premiación: "Fue un momento de gran emoción, sobre todo cuando mi hijo vino a mis brazos feliz. Eso desbordó mi emoción y comencé a llorar. Y cuando vi las lágrimas de mi familia, lloré todavía más. Eran lágrimas honestas, auténticas. Francamente, no lo esperaba y en ese instante me sentí muy feliz. Para la gente que no me conoce, debió ser una gran sorpresa verme llorar así, porque siempre me ven serio sobre el terreno de juego. Para los que comparten la vida conmigo saben que soy una persona natural y espontánea".

Además de la faceta humana, CR7 mostró su admiración por algunos colegas, entre ellos, un uruguayo: "La competencia me ayuda a ser mejor. Pero no sólo con Messi, también con otros jugadores de alto nivel como los que veo en la Premier League y en otros campeonatos: Luis Suárez, Iniesta, Neymar, Bale, Diego Costa o Falcao. Messi y yo estamos en la misma competición, y los dos queremos lo mejor y nos ayudamos a superarnos".